Melo fue fundada en 1795 por el capitán Agustín de la Rosa y por su posición geográfica sería de suma importancia para la historia del país. Este primer asentamiento fue un refugio de la guardia militar y, como en toda esta región norteña, fue un punto de lucha entre indios, portugueses y españoles.
Estas luchas armadas cobraron una importante cantidad de víctimas y por este motivo se formó la División de Cerro Largo, un grupo de soldados criollos que tenía como objetivo defender la tierra y el patrimonio del lugar de todos aquéllos que los pusieran en peligro.
La división logró con su presencia un gran número de victorias que fueron de gran importancia para la independencia de Uruguay y para su posterior desarrollo, sobre todo en un ámbito que por su lejanía de la capital montevideana resultaba lejano y hostil al mismo tiempo.
El objetivo de Cerro Largo fue siempre nacionalista. Por ello, la lengua oficial de Melo y de todas sus instituciones siempre fue el castellano, a pesar de la cercanía de Brasil y su portugués.